UNA MUJER; TODA UNA VIDA EN UN RING...

Cuando Alicia López pensó en sacarse el título de juez crono de boxeo jamás imaginó que su decisión la llevaría a entrar directamente en la historia de este deporte. Lejos de buscar fama o reconocimiento la idea surgió de una forma mucho más humilde.

"Estaba pensando en maneras de abaratar los costes de las veladas— competiciones de boxeo— que organiza mi marido, el ex boxeador Rocky Álvarez, y se me ocurrió hacer de juez crono para no tener que contratar a uno", explica la lucense. Unos meses después, y apoyada por su familia y amigos, Alicia se convirtió en la primera y única mujer juez crono en España tras realizar un examen en Madrid. "Las preguntas versaban sobre el reglamento del boxeo, algo que ya me sé de memoria, por lo que apenas estudié", confiesa la lucense que le debe su afición al deporte del ring a su marido.

Al poco tiempo de sacarse el título López hizo su debut oficial en el torneo europeo de Vigo el pasado mes de junio. "Fue una experiencia muy agradable, me sentí como la niña mimada", asegura la lucense que hasta su estreno no supo que había hecho méritos para entrar en el ‘Libro Guinness de los Récords’.

"Escuché como preguntaban a gente de la Federación si querían hacer historia conmigo y entonces me enteré de que era la primera mujer en España. Fue una sorpresa la verdad", comenta.

La primera experiencia de Alicia no hizo sino reafirmarla en su decisión de convertirse en juez crono. "Desde que tengo dieciséis años he visto combates. He acompañado a mi marido a todos los torneos a los que ha acudido con los chicos del club ‘Boxing Lugo’" asegura esta enamorada y firme defensora del deporte de contacto que, de un día a otro, pasó de la grada a la mesa de jueces. "Si en las gradas era la que más animaba y gritaba ahora todo eso se acabó. Cuando ejerzo de juez tengo que estar totalmente concentrada y no importa si uno de los que está en el ring es de los ‘míos’", explica. Con la campana a su lado derecho y la vista puesta en el ring,

Alicia afirma, que administrar el tiempo en un deporte como es el boxeo es una tarea ardua. "Soy la encargada de dar comienzo o señalar el final de un asalto. Se trata de segundos, pero hay que entender que para un chico que está en el ring diez segundos pueden suponer un mundo", explica la lucense.

"Un deporte bonito"
Su amor y devoción por un deporte al que llegó por casualidad, o mejor dicho por amor, no libra a Alicia de percibir los estereotipos que pesan sobre el boxeo. "La ignorancia puede ser muy atrevida. A la gente que habla sin conocer les aconsejaría que se acercaran a este deporte sin perjuicios ya que no es lo que parece", afirma convencida.

Más de tres décadas en el mundo del boxeo han permitido a esta lucense conocerlo hasta el fondo, quizás por eso no duda en afirmar que es una discplina en el que prima el compañerismo. "Las películas han hecho mucho daño al boxeo, creando un estereotipo que nada tiene que ver con la realidad", confiesa rotunda.

Pese a tratarse de una disciplina mayoritariamente masculina Alicia asegura que nunca se llegó a sentir discriminada por su condición de mujer, más bien todo lo contrario. "Tanto a los boxeadores como a la gente de las competición les gusta que haya una mano femenina pendiente de ellos. Yo, por otra parte, nunca me he sentido intimidada por estar rodeada de boxeadores", confiesa.

Pese a ello, el boxeo no permite que una mujer se convierta en árbitro y suba al ring. "Es una norma", explica López. Eso sí la lucense no descarta del todo acabar con ese reglamento y volver hacer, una vez más, historia en este deporte. Para ello contaría con el apoyo de su familia que se ha convertido en su principal fan. "Mi marido ahora no para de presumir".

"Películas como Rocky nos han hecho daño"
Cuando Alicia López acudió a ver su primer combate de boxeo con dieciséis años solamente tuvo ojos para una única cosa. "Más que ver el combate yo no dejaba de mirar a mi marido, entonces novio". Desde su estreno en las gradas han pasado algunos años en los que Alicia ha perdido la cuenta del número de combates que ha presenciado. "Seguramente superen los 2000 pero no me atrevo a dar una cifra".

Tras una vida dedicada a los boxeadores del Club Boxing Lugo, Alicia decidió volar en solitario y hacer carrera en el arte del juez crono. "Antes se me oía a mi gritar más que a los jueces, pero ahora me toca estar más calladita". Su única pega con respecto al boxeo no reside tanto en el deporte mismo sino en la imagen que se proyecta de él en la sociedad. "Películas como Rocky han hecho mucho daño al boxeo y hoy en día es una disciplina que sufre mucha discriminación. En realidad no es tan peligroso como otros deportes", asegura la lucense. Para Alicia la solución para acabar con los prejuicios pasa por "conocer el boxeo antes de juzgarlo".

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