El boxeo invadirá el Palacio

La marcha de Edgar a tierras germanas ha provocado que José Ignacio Barruetabeña, 'Barru', haya tenido que modificar sus pretensiones de cara al próximo año: «Nuestra idea era que tanto Edgar como Yagüe dieran el paso a profesionales». No sólo eso; además, la intención era programar hasta seis veladas anuales en La Rioja con la presencia de ambos púgiles y otros tres combates fuera. En torno a nueve peleas al año: «Hay que mimar y tratar de evitar combates fuera, sobre todo al principio, ya que lo que interesa es ganar».
Sin embargo, este salto cualitativo y cuantitativo se ha quebrado. Por el momento. «Tendremos que volver a sentarnos -Carmelo Laguna, Matías Sáenz y el propio 'Barru'- para ver cuáles son ahora las pretensiones», insiste el que fuera campeón de España y del Mundo Hispano. Lo que está claro es que el boxeo seguirá presente en la comunidad.
«Tenemos prevista una velada el próximo 21 de febrero en el Palacio». Un nuevo escenario que puede servir de trampolín para que se deje de marginar a este deporte. «Habrá un Campeonato de España en juego con José Antonio López Bueno -el que fuera campeón del mundo del peso mosca-, mientras que el resto de combates tendrá representantes de aquí. Para la siguiente, el objetivo es albergar un Campeonato de Europa», explica 'Barru'.
Nueva apuesta
Los planes, aunque se han truncado, siguen ahí. «Esto -que Edgar se vaya- es un pequeño obstáculo porque pensábamos apostar por él y por Yagüe como estandartes». No en vano, según el ex boxeador, «Edgar tiene unas cualidades sobradas para ser el mejor y teníamos previsto que peleara por el Campeonato de Europa en un par de años».
Por eso, ahora considera que Yagüe Charay será la nueva apuesta. «Quizá no demos el salto todavía a profesionales», aclara 'Barru'. Y eso que «está perfectamente preparado, pero igual esperamos un año más». Que siga madurando, que se curta y que se siga fogueando. Yagüe «es más espectacular». Transmite. «Es lo que le gusta a la gente. En los últimos combates todo el mundo acaba de pie». Al fin y al cabo es para lo que los espectadores pagan.
Otro de los puntos que el preparador cántabro ha tratado de mover desde el primer momento ha sido el apoyo de la televisión: «Lo que queríamos hacer este primer año era un paso para que entrara de lleno después». Señala que, por ejemplo, «la idea era entrar vía Eurosport, pero sólo dan combates de profesionales». Aun así, no desespera. «He invertido dinero -la última velada en Arnedo contó con un presupuesto de 9.000 euros-, pero confío en recuperarlo algún día».
El próximo movimiento será la esperada nave -se ha retrasado en el tiempo- que sirva de sede para los boxeadores. Habrá espacio, nuevos materiales, mejores instalaciones y una infraestructura superior. Si con lo puesto ha surgido Edgar, el futuro riojano en este deporte se alimenta de esperanza con la irrupción de más proyectos. Pese a las bajas.