Spartak Ghazaryan Luchador de 'jiu jitsu', el 'arte suave'

Por :BEGOÑA DEL TESO. Diario vasco.com

Habiendo partido el profesor titular, Borja Mendioroz, a Tailandia a entrenar en los campos de artes marciales, Spartak, armenio, ha asumido las clases de defensa personal femenina que se imparten en el polideportivo de Zuhaizti. Armenio de origen, forma parte de un reconocidísimo grupo de combatientes que entrena en el gimasio Kuraia y es preparado por campeones tal que Octavio, Iván, Josemi o Mikel Cortés.

El Equipo Cóndor, apoyado por Need Sport, es temido en los rings de medio mundo y entre sus miembros hay campeones de Europa y España.

- ¿Elegiste el nombre de Spartak por Espartaco, el esclavo altivo, o por los grandes luchadores de Esparta?
- Admiro profundamente a los guerreros espartanos pero Spartak es mi nombre verdadero, no lo elegí yo sino mis padres en Armenia.

- Entonces, estabas predestinado a ser un gran luchador.
- Armenia ha perdido la tradición de sus formas de lucha más antiguas pero allá practicamos muchos deportes de contacto. Somos fuertes a nivel mundial en el boxeo.

- Lo sé. Honor y gloria a Arthur Abrahamian, diez veces campeón mundial de peso mosca. Y a Howannacs Danielayan, europeo en categoría mini mosca.
- Antes de venirme a Donosti yo practicaba halterofilia. A los tres meses de estar aquí pasé un día por el bar Teo y vi unos carteles que anunciaban combates de kixk boxing, K1 y full contact.

- ¿El Teo de la calle José María Soroa? ¿El bar de Endika?
- Exacto. Yo no hablaba bien castellano y me daba apuro entrar y preguntar dónde entrenaban así que le pedí a mi padre que lo hiciera él. Así me enteré, contacté con la gente de Kuraia y empecé a prepararme con ellos. En Manteo, en Pío Baroja y en el gimnasio del Polígono 27.

- Practicaste halterofilia. Supongo que no es igual el cuerpo de un haltero que el de un luchador.
- Son completamente distintos. El haltero necesita fuerza, potencia. Yo entonces pesaba 100 kilos y levantaba grandes pesas. Cuando me decidí por el boxeo, el kick boxing, el pancracio, el valetudo, tuve que transformar esa fuerza en velocidad. Un luchador ha de ser flexible, muy flexible. Ágil. Y de explosión. Ahora hago pocas pesas y muchas flexiones. Ya no peso 100 sino 83 y soy más fibroso que antes.

- La relación con el dolor también será bien distinta en un haltero que en un luchador.
- Claro. Cuando levantas peso sufres pero no te enfrentas al dolor. En combate sí. Aprendes a controlarlo en los entrenos. En realidad, en el gimnasio te preparas más para recibir que para golpear. Por otro lado, el daño que te provoca un golpe es agudo y no dura más de unos segundos. Si tu mente es capaz de dominar a tu cuerpo, entonces el dolor no tiene importancia.

- Explícame ese triángulo de mente/dolor/cuerpo.
- Sencillo: en el ring muchas veces tu cuerpo está tentado a decir 'no'. No sigo, no quiero, no aguanto. Entonces es la cabeza la que debe tomar las riendas y decir lo contrario: ' Sí puedo, sí quiero, sí aguanto'. Sobre la lona un luchador experimenta un montón de sensaciones. Que van desde el bloqueo (yo siempre me atoro en los segundos iniciales) al subidón. A veces crees que tu rival es grande como un león y no te das cuenta de que en realidad es más pequeño que tú hasta que le abrazas en vestuarios después de que te ha derrotado.

- ¿Por qué el jiu jitsu es 'arte suave'?
-Porque calma a quien lo practica. Porque tiene mucho, también, de la estrategia del ajedrez dado que puedes decidir sacrificar tu brazo, dejar que el contrario te lo agarre, a cambio de luchar con las piernas. Y como en la defensa femenina actual, los guerreros del pasado utilizaban en el jiu jitsu objetos muy cotidianos como armas de defensa: abanicos, paragüas, monedas...

fuente:http://www.diariovasco.com/20100203/san-sebastian/combates-cuerpo-dice-pero-20100203.html